Estocolmo, al norte de todo

El año pasado, por primera vez, me hicieron una carta astral.Fui sin saber qué esperar y me senté frente a la astróloga a ver cómo conectaba líneas y me contaba cosas a las que antes de ese instante, no le había encontrado una explicación certera. No entiendo la astrología, no sé de casas, planetas, niSigue leyendo «Estocolmo, al norte de todo»

Cómo ir del aeropuerto al centro de Estocolmo

En Estocolmo hay tres aeropuertos: el de Arlanda (a 45km), el de Skavsta (a 100km) y el de Bromma (a 8km) al que no es muy común llegar. Como la capital sueca es algo costosa, está bien explorar todas las posibilidades para movilizarse y así decidir cuál es la que más conviene. Yo entré porSigue leyendo «Cómo ir del aeropuerto al centro de Estocolmo»

La escala de Madrid a Estocolmo

No todos los viajeros saben hacer escalas. Hay quienes se entienden solo con vuelos directos. Los entiendo, hacer escala es un camino azaroso –ya ni se diga si son dos– y que requiere de un ejercicio de paciencia ante los imponderables. Decía Santiago Gamboa, un escritor colombiano –vamos, que lo dijo delante de mi enSigue leyendo «La escala de Madrid a Estocolmo»

Así es el DREAM Hostel, en Praga

Tengo dos recuerdos específicos cuando pienso en este hostal. El primero,  cuando llegué a Praga cerca de las once de la noche, y arrastré mi maleta desde la estación de trenes -y por una caminata de 15 minutos más o menos- hasta la puerta del lugar. Pensé que estaba llegando muy tarde, pero era sábadoSigue leyendo «Así es el DREAM Hostel, en Praga»

Un recorrido por Montpellier

Las ciudades pequeñas adquieren otra dimensión cuando se les ve de noche. La mayoría de los lugares están cerrados, pero aún hay gente por ahí caminando hacia algún bar o conversando mientras cenan. La ciudad entra en un sopor quieto, en un silencio que permite distinguir sus otros sonidos: el del tranvía, el de lasSigue leyendo «Un recorrido por Montpellier»

Buongiorno, Italia

No puedo evitar comenzar a escribir esto sin tararear una canción que me da vueltas en la cabeza: “Contando lunares”, de Don Patricio (¿la han escuchado?) porque me encanta cómo empieza: “buongiorno, buonasera los signori y la principessa. Non capito l’italiano, ma italiani de la zona…” Y la verdad, he puesto algo de empeño enSigue leyendo «Buongiorno, Italia»

Así es el hostal Ostello Bello, en Milán

Quizá yo no debería comenzar a escribir esto diciendo que Milán no me encantó. Me parece una descortesía con la ciudad que me recibió por ocho días, pero quizá sí deba decirlo porque en el hostal Ostello Bello me sentí como en casa, aun estando tan lejos de la mía y en un lugar queSigue leyendo «Así es el hostal Ostello Bello, en Milán»

¿Me esperas, Madrid?

Voy a llegar el día en que los árboles no estén tan desnudos. Será primavera y hará frío, pero encontraré el abrazo justo, el sabor del vino tinto, el calor de la risa y las lágrimas acumuladas de tanta distancia. ¿Me esperas, Madrid? ¿Me esperas hasta que podamos vernos lejos de tu invierno? Lejos deSigue leyendo «¿Me esperas, Madrid?»

¿A dónde me llevas, Irlanda?

Había algo espeso en el ambiente que empañaba el vidrio delantero del autobús. Cuando no se conoce el sitio, uno quiere ver todo a través de la ventana mientras se va buscando el camino, pero cuando la visión es borrosa no queda más que ver cómo suben y bajan los pasajeros en las paradas ySigue leyendo «¿A dónde me llevas, Irlanda?»

La inesperada Malta

El avión se tambaleó con fuerza unos minutos antes de que Malta se dejara ver desde arriba. Estábamos por cumplir dos horas y quince minutos de vuelo desde Madrid, cuando la azafata anunció que todos debían volver a su asiento y abrocharse los cinturones. Malta apareció serena, con su cara de piedra acostumbrada a mirarSigue leyendo «La inesperada Malta»